Catalejos
Opinión por Miguel Domínguez Flores
Es inevitable: cuando en el último minuto del 30 de septiembre se dé el cambio de gobierno, al interior de Acción Nacional habrá un reacomodo de las diferentes fuerzas políticas que durante 6 años se cohesionaron en torno a su primer gobernador tamaulipeco.
- Francisco García Cabeza de Vaca dejará el cargo, pero es evidente -él mismo lo ha dicho- que no se alejará de la vida pública. Por el contrario, muchas de las iniciativas que ha empujado su bancada en el Congreso recientemente apuntan a que pueda mantener un grado importante de influencia durante los próximos años.
- Jesús Nader se quedará como el panista con la posición política más importante del estado. Al menos hasta el 2024 seguirá al frente del Ayuntamiento de Tampico, uno de los más relevantes en términos sociales y económicos, y de hecho, el único de los llamados grandes que seguirá bajo control blanquiazul.
- César Verástegui, según ha trascendido, tampoco tiene intenciones de retirarse de la política. La votación que obtuvo el 5 de junio lo dota de suficiente capital político como para mantenerse vigente al interior del partido, e incluso, para reclamar una posición de privilegio en una eventual disputa por el control del Comité.
- Félix “Moyo” García seguirá siendo el presidente de la Junta de Coordinación Política, al menos hasta que Morena logre reorganizarse en el Congreso. No es una posición menor, incluso debería considerarse de mayor relevancia que una alcaldía como la de Tampico, pero a la hora de poner en la balanza el perfil de los personajes, huelga decir que Nader ejerce un control político en el puerto, que “Moyo” no tiene en Nuevo Laredo, donde los Canturosas han edificado uno de los bastiones morenistas más importantes.
- Imelda Sanmiguel dejará de ser la presidenta de la Mesa Directiva del Congreso desde donde encabezó la promoción de las iniciativas que dan vida al plan maestro de Acción Nacional para conservar algo de poder más allá del 1 de octubre, y desde luego, complicarle el inicio de su gestión al gobernador electo, Américo Villarreal Anaya. Muchos la sitúan como la sucesora natural de Luis René Cantú, “El Cachorro”, que en el mes de septiembre deja la dirigencia estatal y se reintegrará a su bancada.
Seguramente hay más personajes que influirán en las dinámicas del PAN durante los próximos meses, pero de la forma en que puedan relacionarse estos cinco panistas, dependerá el derrotero que tome su embarcación luego de la tormenta que los azotó hace poco más de un mes.
El affaire de las licencias
La política tamaulipeca nos regala innumerables episodios de comedia involuntaria, como ayer con la promulgación del decreto que quita vigencia a las licencias de conducir, con lo que aquellas que sean tramitadas a partir de ahora serán permanentes.
La historia, a grandes rasgos: en febrero, la bancada de Morena, cuando todavía tenían una ligera mayoría, presentó y aprobó una iniciativa para que el permiso de conducir dejara de tener caducidad.
Durante más de cinco meses, la reforma no se publicó en el Periódico Oficial hasta este martes, a partir de lo cual, empezó a tramitarse en las oficinas fiscales del estado.
La mejor parte: los diputados del PAN, que habían votado en contra de la modificación, ayer salieron a celebrarla; y los de Morena le pidieron a la población que espere un poco, un poquito más, para aprovecharla. Es la época que nos tocó vivir.
