Carlos Manuel Juárez
Tras 18 meses de ataques y señalamientos, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y el gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, pactaron la tregua política enmarcada en una fotografía.
En julio de 2021, López Obrador advirtió que no se reuniría con el gobernador Cabeza de Vaca debido a su cuestionado estatus legal como titular del Poder Ejecutivo estatal, derivado del proceso de desafuero por el que hay controversias en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
La situación legal de Cabeza de Vaca no ha cambiado y eso es el motivo de que el presidente mexicano evite convocarlo a las actividades en la entidad. A esta situación se suma la confrontación entre los dos políticos, que se incrementó por las publicaciones que apuntan a la presunta responsabilidad del tamaulipeco en el espionaje a la familia López Beltrán.
No obstante los ataques que protagonizaron el presidente y el gobernador entre febrero y junio de 2021, ahora se vive un periodo de calma, inclusive, el titular del Poder Ejecutivo nacional ha decidido no opinar y dejar la decisión en manos de la FGR y la Corte.