Redacción EB
José Jacobo Rodríguez perdió la vida el pasado miércoles 10, cuando transitaba por las calles de Nuevo Laredo en compañía de su esposa, la cual sobrevivió al ataque militar. El Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo (CDHNL) denunció que se trató de una ejecución arbitraria a manos de miembros de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena),
Con este caso, suman ocho víctimas de militares en la ciudad fronteriza en lo que va del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
La información sobre la ejecución de Rodríguez González se dio a conocer minutos después de que el presidente López Obrador salió en defensa del Ejército mexicano y aseguró que “cuida y protege los derechos humanos”, luego de anunciar que este viernes el subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, rendirá un informe sobre el operativo militar en Nuevo Laredo, en junio del año pasado, en el que murieron tres jóvenes que habían sido secuestrados por presuntos integrantes del crimen organizado.
De acuerdo con el CDHNL, en los últimos 15 meses ha documentado “al menos ocho ejecuciones y tres detenciones arbitrarias, así como dos agresiones armadas cometidas por personal del Ejército mexicano en contra de la población civil, además de 10 casos de daños materiales a comercios, viviendas y vehículos particulares que las autoridades militares se han negado a cubrir”.
En el caso de Rodríguez González, la organización detalló que la tarde del 10 de marzo, él y su esposa viajaban en una camioneta Yukon modelo 2003, rumbo a la Cruz Roja donde a su mujer le practicarían un ultrasonido.
De acuerdo con el testimonio de la esposa, alrededor de las 5 de la tarde, en el crucero Santos Degollado y Gutiérrez, fueron atacados de forma directa por soldados del Ejército mexicano, quienes se trasladaban en dos unidades tipo pick up y un camión blindado.
Derivado de la agresión, José Jacob recibió un disparo en la nuca con salida en la cara y otro en el hombro, lo que obligó a detener la marcha del vehículo.
En apego al testimonio de la sobreviviente, la organización informó: “los militares procedieron a revisar la camioneta de las víctimas en lugar de prestarles auxilio, hasta que llegaron paramédicos de Bomberos y trasladaron al herido al Hospital General, donde a los pocos minutos falleció por la gravedad de las lesiones”.
Los familiares de José Jacob, dedicado a la venta de autos, formalizaron una denuncia contra los militares ante la Fiscalía General de la República (FGR) y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), organismo al que solicitaron “investigar esta nueva ejecución arbitraria e implementar medidas cautelares en favor de la población de Nuevo Laredo ante el incumplimiento de los protocolos de uso de la fuerza por parte de personal del Ejército mexicano”.
Asimismo, el Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo (CDHNL) ha denunciado que elementos del 21 Regimiento de Caballería Motorizada de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), con sede en Nuevo Laredo, Tamaulipas, “han sido responsables de al menos 12 ejecuciones extrajudiciales en contra de civiles desarmados” desde noviembre de 2019 y hasta el pasado 10 de marzo, sin que hasta la fecha hayan sido investigados ni sancionados por estos hechos.
Nuevo Laredo es escenario de conflicto entre narcotraficantes desde hace 20 años. Los asesinatos arbitrarios son una de las consecuecias de estos enfrentamientos.
El pasado 10 de marzo un grupo de soldados emboscó el vehículo en el que viajaban una embarazada y su marido; sólo ella sobrevivió. La familia de la víctima ha padecido el abandono de las autoridades.
Desde 2011 permanecen impunes al menos 40 casos denunciados.